lunes, 4 de enero de 2010

La montaña

Cada uno de nosotros es dueño de una montaña ubicada en un punto geográfico del universo. Acceder a ella es camino que cada uno conoce, pues se lleva dentro de si un mapa otorgado al momento de nacer, el cual ha sigo otorgado por un ser de conciencia elevada que emana luz.

La montaña siempre aguarda la llegada de peregrinos cuyas cicatrices descubren las batallas,los aciertos,las lecciones de lo que nos hemos convertido. Montaña secreta cuyo paisaje imagino,ya se asoma la aurora,el canto y sonido del rió que te rodea, espera que ya emprendo el camino,deje el descanso,la apatía,el enojo,la inercia,el miedo a encontrar la esencia, la original persona.

Koyanky